Guerra Lenta

Sé que debería dejar de tomar prestados títulos de canciones para hacer mis entradas, pero ¿qué puedo decir? A veces pensar en la melodía ayuda a que fluyan las palabras, despeja los caminos del pensamiento y en ocasiones, provee la fuerza necesaria para exteriorizar el hilo de pensamiento.


Siguiendo la mecánica del blog, mantengo el "Yo" limitado y dejo que las palabras hablen por sí mismas, bon appetit.

------------------------- ( Improvisación "antes de" )-----------------------------

Cogió su teléfono móvil del aparador y marcó el número de emergencias.

- Bienvenido a EMERFÁCIL, cual es su emergencia? - sonó la dulce voz de una joven a través del auricular. Esta probablemente pertenecía a una de las tantas reclutas poseedoras de una "voz inhibidora de tragedias", o como sea que lo hayan publicitado en el noticiario esta mañana.

- Tengo una emergencia - es difícil no parecer un estúpido llamando a la línea de EMERFÁCIL si no tienes una verdadera emergencia - Necesito hablar con Joe Smith

Pude casi observar el color dejando las mejillas de mi anónima amiga al otro lado de la línea mientras marcaba el número 01230123 de su teléfono, lo cual indicaría a su superior que una "situación inesperada" había surgido.

-Habla - ladró a través del comunicador "Joe Smith" - y más vale que sea bueno

- Oh es bueno, créeme, pero tienes que salvarme el pellejo - le espeté nerviosamente

-¿Cuándo he dejado de hacerlo? - rió burlonamente - ¿Dinero otra vez?

-No - le dije calmadamente - Son ellos, han vuelto

Esa fue la última vez que hablé con Joe Smith.

------------------------- ( /Improvisación "antes de" )-----------------------------






Mía

Mía.
Porque jamás dejarás de nombrarme,
y cuando duermas habrás de soñarme,
hasta tu misma dirás que eres mía

Mía.
Aunque mañana te liguen otros brazos,
no habrá quien sepa llorar en tus brazos,
nunca te olvides, sigues siendo mía

Mía.
Aunque tu vayas por otro camino,
y que jamás nos ayude el destino,
nunca te olvides, sigues siendo mía

Mía.
Aunque con otro contemples la noche,
y de alegría hagas un derroche,
nunca te olvides, sigues siendo mía